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| Blödhgarm | |
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| Físicas | |
| Especie | Elfo |
| Género | Masculino |
| Edad | Desconocida |
| Color de Cabello | Azul |
| Color de Ojo | Amarillos |
| Políticas | |
| Afiliaciones | Vardenos, Elfos, Eragon |
| Otros | |
| Actor en la Película | N/A |
Blödhgarm era un elfo que ha transformó su apariencia física para parecerse a las bestias de tierra, las que según él son la representación de la belleza. Estuvo a cargo de la guardia de hechiceros elfos que envió Islanzadí para proteger a Eragon y Saphira durante la guerra.
Apariencia[]
Blödhgarm tenía la dentadura de un lobo, el pelaje de un gato del bosque, y el ojo del águila. Tenía un pelaje azul que algunas mujeres consideraban hermoso. Su nombre en el idioma antiguo significa "Sangre de Lobo". También producía un olor similar al almizcle, que produce atracción solamente para las mujeres. No se sabe si es un efecto secundario de su transformación o fue producido por un hechizo. Este aroma es tan fuerte que otros miembros de los Elfos (como Arya) creaban defensas para evitar caer bajo sus efectos. El le dijo a Nasuada que su transformación no era permanente, y si algún día pensaba que las criaturas del mar se veían hermosas cambiaría su pelo por escamas y aletas.
Historia[]
Es hijo de una elfa conocida como Ildrid la hermosa y tiene un primo llamado Liotha que también tiene apariencia de lobo. Se desconoce su edad aunque tal vez se le vea como adulto desde la perspectiva élfica.
Fue enviado por Islanzadí junto con otros once elfos para servir como protectores de Eragon. En este grupo Blodhgarm es el líder. Él ha dicho que sus hechiceros son lo suficientemente fuertes para ganarle hasta a dos de los apóstatas, claro que con una dragona como apoyo. Esto se comprobó durante la breve pelea entre Eragon y Murtagh en la batalla del río Jiet, donde los elfos fueron de gran importancia en la batalla al prestarle su energía al jinete ademas de curar a Saphira en algunas ocaciones. Mientras Eragon asistía a la elección del nuevo rey enano Blödgarm y los otros crearon una ilusión de Eragon que montaba a Saphira para que el enemigo no se enterara de la ausencia del jinete.
Durante la batalla de Feinster peleó al lado de Arya, y con ayuda de Eragon abrió las puertas de la ciudad. Luego Eragon encontró a sus guardias a un lado de la puerta del castillo de Lady Lorana, la cual estaba fuertemente protegida por barreras mágicas. Eragon amonestó a sus elfos y les dijo que al pelear a su lado también pelean por los Vardenos, después de esto Eragon abrió la puerta y se adentró en el castillo, dejando afuera a Blodhgarm y a sus elfos. Esta decisión casi le cuesta la vida a Eragon, que sufrió severas heridas, por lo que tras la batalla se disculpó con el elfo, disculpándose también Blodgarm y prometiendo que la próxima vez lucharían con los Vardenos y no se limitarían a solo proteger a Eragon y a Saphira.
Cuando Glaedr empezó a recuperarse de su duelo Blödgarm lo provocó para evitar que cayera de nuevo en la melancolía, diciendo que el progreso en el entrenamiento de Eragon no era suficiente porque ni él ni los otros elfos eran los maestros del jinete, y que Glaedr era quien debía de hacerse cargo de la formación de Eragon y Saphira. Esto enojó a Glaedr, pero fue efectivo.
Durante la batalla de Dras-Leona se disfrazó de Eragon usando magia y montó a Saphira para engañar a Murtagh y Espina. Cuando Eragon le avisó a Saphira que ya estaban en la ciudad Blodgarm le avisó a Nasuada. Después de la victoria de los vardenos Blodgarm y los otros hechiceros fueron a buscar a Wyrden y la enterraron fuera de la ciudad.
En la batalla de Uru'baen Blodgarm y los hechiceros elfos acompañaron a Eragon, Saphira, Arya y Elva para enfrentarse a Galbatorix, lograron pasar las primeras trampas (aunque perdieron sus espadas) pero al llegar a la puerta que daba al salón del trono de Galbatorix fueron hechizados y obligados a entrar por una puerta oculta. Después de la derrota de Galbatorix se encuentran con Arya mientras ella buscaba el último huevo de dragón y la ayudan a llevar los eldunaríes. Horas después se los tienen que llevar afuera de la ciudad pues empezaron a atacar las mentes de las personas alrededor a un castillo, donde se dedican a tratar de ayudar a los eldunaríes enloquecidos. Cuando Eragon y Saphira deciden irse de Alagaësia en busca de un lugar para criar a los dragones Blodgarm está entre los elfos que los acompañan.